Antes que surgiera la prensa médica o científica especializada en nuestro país, que se remonta al año 1840, con la publicación del Repertorio Médico Habanero y se mantiene ininterrumpidamente hasta la actualidad, había que buscar las noticias relacionadas con la medicina o las enfermedades, en las publicaciones de carácter general y periódicas, en otros tipos de fuentes primarias de datos, como son las actas de asociaciones privadas o instituciones públicas como son las del Ayuntamiento de La Habana, las de la Real Sociedad Económica de Amigos del País u otras.